Cuenca es la provincia manchega con Naturaleza en mayúsculas. Famosa es su estampa de las casas colgadas, sus curiosas formaciones rocosas y su espectacular entorno natural con el nacimiento del río Cuervo o Las Torcas en la serranía conquense.
Hoy os invitamos a viajar a Cuenca y sus alrededores. Entre nuestras propuestas, visitar museos, monumentos, callejear, contemplar sus vistas panorámicas de infarto, hacer senderismo o revivir la época romana asomándonos al yacimiento arqueológico de Segóbriga.
Ciudad
Nuestra escapada parte de la capital, del centro histórico de Cuenca, Patrimonio de la Humanidad desde 1996. La ciudad cuelga literalmente sobre las Hoces del Río Huécar. Y eso se nota durante nuestro recorrido que encontramos paredes rocosas en cada esquina de la ciudad.
Las Casas Colgadas
Sin duda son el símbolo de Cuenca. Una serie de casas que se asoman desde las paredes de la montaña al vacío del acantilado. Del conjunto arquitectónico solo se pueden visitar 3. La Casa de la Sirena, hoy en día convertida en restaurante y las Casas del Rey, que acoge el Museo de Arte Abstracto español, considerado uno de los mejores de España, incluso de Europa. Guarda una colección de pinturas y esculturas de artistas españoles de la década de los 50 y 60.
Calle de Alfonso VIII
Os sorprenderá pasear por esta calle en pleno casco histórico gracias a sus bonitas casas de colores en azul, rojo, amarillo, naranja, blanco,..
Plaza Mayor
Seguimos nuestro recorrido por la Plaza Mayor, donde se encuentra el actual Ayuntamiento, el Convento de las Petras y la catedral de la ciudad, del siglo XII. Esta plaza es el centro neurálgico donde se concentra la vida de los conquenses y donde podemos hacer una parada para tomar algo.
Catedral de Santa María y San Julián
De estilo gótico normando, que ha ido adquiriendo a lo largo de la historia otros estilos arquitectónicos como el plateresco o el barroco. Destaca su espectacular fachada, aunque ha sido remodelada con el tiempo.
Torre de Mangana
Actualmente convertida en la torre del reloj de la ciudad, se piensa que su origen fue con carácter defensivo y de vigilancia. Data del siglo XVI y está construida sobre el antiguo Alcázar.
Los rascacielos de Cuenca
Nos acercamos al barrio de San Martín. Una zona que conserva su aire medieval con las casas verticales pintadas en blanco y rojo, que le dan ese aspecto de rascacielos. Un lugar precioso si queréis dar un paseo tranquilo, ya que no suele estar masificado por turistas.
Puente San Pablo
Desde aquí se contemplan las mejores vistas de las Casas Colgadas y de las Hoces del Río Huécar. Por el puente que podemos transitar actualmente no es el originario, que fue construido en piedra en el siglo XVI. El de hierro y madera es de principios del siglo XX.
Ruinas del Castillo
Si os gusta conocer los orígenes de una ciudad, dirigiros a la calle Trabuco donde se conserva parte de la muralla y sus torres del siglo XIII. Aquí se puede contemplar el arco Bezudo, que era una de las puertas de entrada a la ciudad
Túnel de Alfonso VIII
Como curiosidad os recomiendo una última visita a este túnel que sirvió como refugio durante la guerra civil. Son un conjunto de galerías y túneles que están repartidos por Cuenca y que el Ayuntamiento está estudiando abrirlos al público. Sólo se visita éste, que está en la calle de Alfonso VIII y su entrada es gratuita.
Las Hoces
Os proponemos una excursión de senderismo por el río Huécar que podemos hacer partiendo desde la misma ciudad. Bajamos por el barrio del Castillo y seguimos por el Camino de los Jerónimos. Un agradable paseo por la propia Hoz del Huécar con miradores para asomarnos a contemplar la Cuenca más monumental. Llegaremos a la Cueva del Fraile, un hotel construido en un antiguo monasterio del siglo XVI. Por esta zona se pueden realizar distintas rutas, elige la que más te apetezca en función de las fuerzas que te queden después de visitar la ciudad.
La Ciudad Encantada
Cogemos el coche y nos adentramos en plena serranía de Cuenca. A 30 minutos encontramos este peculiar paraje repleto de rocas con formas muy curiosas y que tienen nada menos que 90 millones de años. Durante nuestro recorrido podemos descubrir animales esculpidos en piedra natural. Una visita imprescindible en la provincia de Cuenca.
Torcas de Los Palancares
Muy cerca de la capital encontramos una zona donde la acción del agua en las rocas calizas ha dejado como resultado unos enormes agujeros que se conocen como lasTorcas de Palancares. Una excursión de senderismo muy fácil de hacer para conocer las 22 que podemos encontrar a nuestro paso. Estos enormes agujeros en la tierra se suelen llenar de agua durante los meses de otoño e invierno, por eso, os recomiendo visitarlas en esta época del año. Cada una es distinta, con formas diferentes y el color del agua también cambia. Un espectáculo en plena naturaleza. Os recomiendo las Torcas del Lobo, la Rubia, la del Agua y la Torca de la Novia.
Cómo se llega
Por la carretera N-420 desde Cuenca en dirección a Teruel. Atraviesas la localidad de Mohorte y después de 8 km se llega a un aparcamiento, deja el coche y empieza el camino que te lleva a descubrir las Torcas.
Nacimiento el Río Cuervo
A una hora y media en coche desde Cuenca se encuentra este espectacular paraje natural. A pocos km de la localidad de Tragacete, dejaremos el coche en un parking. Ahí comienza el sendero que nos llevará por cascadas de manantiales y pozas hasta llegar a una pequeña gruta desde donde brota el agua del río Cuervo, entre musgo y vegetación. ¡Quédate a escuchar el ruido del agua entre la tranquilidad de la naturaleza!
Segóbriga
Llegamos al pueblo de Saelices y desde allí, a 3 km, encontramos el Parque Arqueológico romano de Segóbriga. Este yacimiento alberga un foro, las termas, el coliseo, acueducto, las necrópolis, la muralla con su puerta principal, la basílica, un anfiteatro y lo que mejor se conserva, el teatro. Se puede visitar, con horario de martes a domingo, desde las 10 a las 18 horas.